Los dientes de un bebé empiezan a salir a partir de los 6 meses. La dentición completa de leche puede durar hasta los 3 años. Hay casos en que el inicio del brote de los dientes es anterior a esa edad e incluso hay niños que nacen con dientes. En el otro extremo están los niños que con 3 años todavía no tienen la dentición de leche completa. Esto no quiere decir que tu hijo sea precoz o esté enfermo. Simplemente se debe a que la erupción dental tiene que ver con un factor genético.
La erupción dental no hace enfermar a un niño dado que este periodo abarca una gran etapa. Es normal que nuestro bebé se resienta pero no existe una relación causa-efecto.
La gran salivación que se produce se debe a que el bebé se está preparando para la ingesta de alimentos y continuamente está rozando los dientes con la lengua. Esta es la principal causa de la salivación y no los piquitos de los dientes que asoman.
Diarrea como consecuencia de la dentición
Si nuestro bebe tiene diarrea, fiebre alta o vómitos debemos llevarlo al médico ya que probablemente no sean causados por la erupción dentaria. Generalmente en este período los niños están más irritables, tienen las encías inflamadas y se llevan todo a la boca. Por ello, es fácil que las diarreas puedan ser síntoma de otra enfermedad que puede estar afectando al niño.
Sin embargo, el cambio de PH de la saliva sí puede provocar escoceduras. La saliva se vuelve más ácida y, al tragarla, la orina también se vuelve más ácida afectando a su delicada piel, pudiendo provocar irritaciones e incluso heridas. La mejor solución a este problema es cambiarle el pañal en cuanto notemos que está mojado. Al limpiarlo y cambiarlo es conveniente aplicar algún tipo de crema protectora para evitar la aparición de heridas y escozores. De esta manera haremos menos doloroso el proceso de dentición de nuestro pequeño.